Policía mata dos presuntos delincuentes fugados de la cárcel de Macorís


La Policía Nacional informó hoy la muerte de dos reclusos que se fugaron ayer de la cárcel pública de San Pedro de Macorís
La Policía informó que el hecho ocurrió en el barrio Borojol, Santa Fe, en dicha provincia, y que para escapar los hoy occisos golpearon con un galón llenó de arena a un vigilante penitenciario y luego lo desarmaron.
Se trata de  Emil Reyes Reyes, de 40 años, y Yohan Alcántara Silverio, de 22, quienes presentan heridas de bala en distintas partes del cuerpo, ocasionadas por los agentes del orden que repelieron una supuesta agresión a tiros.
En poder de  ambos hombres se ocuparon dos armas de fuego, incluyendo una pistola Carandaí calibre 9 milímetros, número G-36526,  despojada al vigilante,  y una Hungari, calibre 9 milímetros AE03008  que obtuvieron tras huir del CCR.
Previamente habían dejado abandona la escopeta marca MOSBERG calibre 12 milímetros, cañón largo, en el patio trasero  de una residencia ubicada en la calle Juan de Peña del sector Placer Bonito, la cual también se encuentra en poder de las autoridades.
Habían logrado escapar en horas de la mañana, en medio de un incidente bajo investigación de la Procuraduría General de la República.
En la fuga fue capturado un tercer interno identificado como Bernavis Lara Puello, quien fue herido de bala por uno de los agentes penitenciarios.
En tanto, que el vigilante golpeado es Yuberis Michel Marcel, de 34 años, a quien los hoy occisos despojaron una escopeta y una pistola.
La Policía recordó que Reyes Reyes había sido condenado a 30 años de prisión, junto a Guillermo Antonio de los Santos, por el asesinato del mayor de la Fuerza Aérea José Manuel Herrán Mancebo. La condena les fue impuesta por  Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación de la provincia Santo Domingo.
Además se le atribuyen múltiples crimines por encargo y haber amenazado a jueces y representantes del Ministerio Público.
El asesinato de Herrán Mancebo se produjo el 29 de diciembre del año 2005, en la autopista San Isidro, cuando se dirigía a su lugar de trabajo, en la Base Aérea. 

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